Desarrollo: los
participantes se dividen en grupos de cinco, (aunque pueden ser más o menos).
Uno de ellos se rodea de los otro cuatro que le tocan con un dedo. El jugador
del centro es la cabeza del pulpo, que tiene los ojos abiertos y dirige los
desplazamientos del animal. Los que rodean son los tentáculos: tienen los ojos
cerrados, deben seguir todos los movimientos
de la cabeza, sin perder el contacto físico de la punta del dedo con el
jugador del centro. A la señal se van cambiando las posiciones. Al finalizar el
grupo comparte las experiencias vividas.
Materiales: ninguno.
Tiempo: 15 minutos.
Que intenta trabajar:
desarrolla
la confianza favorece la distinción.
Muy interesante...
ResponderEliminarMuy interesante...
ResponderEliminarMuy bueno
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